Los jóvenes del semiárido bahiano fueron uno de los grupos más afectados con la situación de la Covid‐19. Los sistemas educativos y las organizaciones que actúan como puente entre las escuelas y las familias permanecieron cerradas dejando aislados y sin poder asistir presencialmente a sus clases a la población más joven.

El Lar Santa María trabaja para dar solución a la situación actual y con el objetivo de no dejar a nadie atrás, quiere, a través del acceso de las nuevas tecnologías de la información, ayudar en el desarrollo de las competencias socio‐emocionales‐culturales de dichos jóvenes. El fin de este proyecto es el de conseguir implementar la tecnología necesaria para que estos jóvenes puedan ser parte de un futuro más sostenible.

Con el proyecto Jóvenes liderando las comunidades rurales, financiado con la colaboración del Ayuntamiento de Calahorra, buscamos contribuir a una cultura sostenible reduciendo las brechas tan marcadas y desiguales. También, nos planteamos superar el aislamiento impuesto e incluir a nuevas y diversas voces en la creación y fortalecimiento de redes capaces de ofrecer nuevas realidades con más dignidad para la infancia y la juventud.

Nos centramos en la juventud como agente de transformación, para dar a conocer los derechos en las comunidades, movilizar los territorios para ejercer ciudadanía y ampliar oportunidades de ocio creativo. Queremos facilitar y favorecer espacios y mecanismos de aprendizaje, de intercambio y de participación, capaces de generar mejores estructuras de bienestar y prácticas democráticas desde la equidad. Gracias al acceso a ordenadores, ampliaremos la información, apoyando el proceso de aprendizaje, desarrollo de competencias, tecnologías y agricultura sostenible, innovación social, etc. Es decir, ampliar la perspectiva de carreras y trabajos para dar más sentido a la vida rural.

La población beneficiaria se trata de un grupo de aproximadamente 150 niñas, niños y adolescentes que viven en una ruralidad dispersa con extrema precariedad de acceso a servicios básicos y oportunidades de desarrollo integral; están en edad escolar y participan con implicaciones diversas en los proyectos y actividades socioculturales propuestas por el Lar.

Gracias al apoyo del Ayuntamiento de Calahorra pudimos realizar la compra de 10 ordenadores portátiles, dos teléfonos móviles y realizar los talleres para el desarrollo de las competencias socio‐emocionales‐culturales de jóvenes rurales.

 “Formación Profesional de Jóvenes Rurales” es un proyecto de Lar Santa María, en colaboración con Fundación Pioneros y el Ayuntamiento de Logroño para despertar el interés de las comunidades para la búsqueda de alternativas complementarias que generen empleo, agreguen renta, fortalezcan la agricultura familiar y consecuentemente mejoren las condiciones de vida de las comunidades. Apostamos por el desarrollo de iniciativas de formación profesional de los jóvenes de las comunidades rurales de Itiúba.

En la Asamblea General del Lar Santa María de 2017 fueron los propios jóvenes quienes solicitaron que se adoptasen como prioridades la inclusión de nuevas tecnologías, carpintería, emprendimiento y formación de líderes. Talleres que contribuyen con el diseño de alternativas complementarias a la agricultura familiar y por otro lado facilitan la integración de las personas y el desarrollo de las comunidades.

A pesar de estar viviendo una de las mayores crisis de la historia del país ya que no es solo económica, es también social, cultural y política y estar viviendo un momento importante de convulsiones sociales y manifestaciones, los jóvenes buscan construir su sueño y futuro.  La crisis que, en un primer momento, pensamos que podía  frenar la participación por tener más dificultades para contribuir con el sustento familiar, ha generado el despertar de los jóvenes.

De forma directa se han beneficiado de este proyecto 312 participantes; y de forma indirecta llegamos a 13.500 habitantes de las comunidades del territorio Este del municipio de Itiúba.

El proyecto ha conseguido mejorar la calidad formativa de los jóvenes, potenciando el conocimiento, la utilización de tecnologías y ha provocado el despertar para la conciencia ética, política y ciudadana.  Despertar que enriquece la acción comunitaria y la transformación social. Afirmamos que la eficacia de los resultados se constata por  la información, la libertad de opinión y expresión, el desarrollo intelectual, social, económico y político de los jóvenes rurales participantes.

Vídeo: Programa Logroño Solidario TVR (2018)

Vídeo: Logroño solidario 2018 en Popular TV

Un proyecto de Lar Santa María en colaboración con Fundación Pioneros para la formación y capacitación de los jóvenes de las comunidades rurales de la Sierra Norte de Itiúba para contribuir a emprendimientos económicos colectivos propios del turismo rural.

La juventud participante del proyecto: “Formación de Jóvenes y Equipamientos para el Eco Turismo Rural”  vive, por un lado, la realidad de la pobreza originada por la agricultura de subsistencia, el descenso de los derechos sociales, la pérdida de la biodiversidad y, como consecuencia, el éxodo rural. Por otro lado esta juventud vive la belleza y admiración de un área de sierras de medio porte, la caatinga (vegetación autóctona de bajo crecimiento), la riqueza cultural latente en su folclore, manera de vivir y gastronomía.

Ante esta situación el Lar Santa María viene despertando el interés de las comunidades por buscar alternativas complementarias, que generen empleo, agreguen renta, fortalezcan la agricultura familiar y consecuentemente mejoren las condiciones de vida de las comunidades.

Con este nuevo proyecto, financiado por el Ayuntamiento de Logroño, se pretende investir en la formación y capacitación de los jóvenes de las comunidades rurales de la Sierra Norte de Itiúba y a medio plazo contribuyamos con emprendimientos económicos colectivos propios del turismo rural.

La sequía que azota la región, después de 5 años sin agua, provoca la desertización de la región y la emigración para las regiones metropolitanas del país. Principalmente de las mujeres productoras de las huertas, que de sus manos depende la alimentación diaria de la familia.

Con el fin de mejorar las condiciones de vida con la producción de alimentos y renta, se trabaja en este nuevo proyecto de Lar Santa María, en el que colabora Fundación Pioneros, para implantar tecnologías de captación y almacenamiento de agua de lluvia e instalación de pozos en las propiedades de familias productoras del semiárido que pertenecen al proyecto PAIS (Producción Agroecológica Integrada Sostenible). El proyecto Agua para la producción de alimento y renta beneficiará directamente a 70 familias agricultoras del Estado de Bahía en Brasil e iniderctamente a 3.500 consumidores.

El año 2013 Lar Santa María intervino y apoyó la instalación de 3 pozos. Dos de buena calidad y otro, con el apoyo de un desalinizador, puede ser utilizado para el riego y dar de beber a algunos animales. Estos pozos provocaron esperanza en las comunidades instaladas y motivaron a los participantes para continuar plantando. Acreditamos que el subsuelo nordestino tiene agua, falta iniciativa y voluntad de cambiar la situación vivida hasta el momento.

La concepción y la ejecución del proyecto han sido largamente discutidas con las comunidades locales y se integra en el modo de vida de los participantes. En el paisaje de las comunidades encontramos a las mujeres cargando baldes de agua y reutilizando el agua para regar y evitar que los frutales se mueran.

El proyecto Agua para la producción de alimentos y renta, apoyado por el Gobierno de La Rioja con 30.300 €, tiene como objetivo fortalecer las iniciativas de estructuras de producción e inclusión productivas que, si disponen de agua, tienen la capacidad de contribuir con la reducción de la miseria en el medio rural.

El primer paso en este proyecto consiste en la selección de las familias participantes, preparar el equipo de trabajo y definir la tecnología que se aplicará. Paralelamente se realizará un curso de gestión del agua para la producción de alimentos y un curso a albañiles para construir las cisternas de almacenamiento del agua. La implantación del proyecto comienza con la construcción de 7 cisternas y la perforación de 7 pozos para el abastecimiento de agua.

PAIS es un proyecto que está dirigido a 100 pequeñas familias rurales, de baja renta del semiárido nordestito, pensado para mejorar las condiciones de vida de la población, asegurar la alimentación y favorecer la inclusión social y la sostenibilidad preservando el suelo, el agua, el medio ambiente y la salud de las personas y de nuestro planeta.

Con la implantación del proyecto PAIS también se contribuye a la mejora de la calidad de la merienda escolar, ya que ofrece productos sin agrotóxicos a los alumnos de las escuelas públicas. (La Ley de Seguridad Alimentaria exige que los ayuntamientos deben adquirir el 30% de los productos de la merienda escolar a los pequeños agricultores).

La producción se denomina agroecológica: porque dispensa el uso de acciones dañinas al medio ambiente, como agrotóxicos; integrada: porque conjuga la cría de animales con la producción vegetal y además utiliza bienes de la propiedad en todo el proceso productivo; y sostenible: porque preserva la calidad del suelo y del agua, promueve el asociacionismo de los productores y apunta nuevos canales de comercialización de los productos, permitiendo buenas cosechas.

Este proyecto se desarrolla con comunidades que viven en el extremo de la pobreza por la reducción o pérdida de la capacidad productiva de la agricultura familiar y el creciente abandono de estas tierras por los más jóvenes. La puesta en marcha de una cooperativa de colecta selectiva de basura, en los poblados y aldeas del Semiárido de Itiúba (Bahía), es una alternativa complementaria a la capacidad productiva de la región.

El objetivo de este proyecto de cooperación es impulsar el desarrollo económico, recuperar y conservar recursos naturales, ayudar a la descontaminación del paisaje y las aguas y favorecer la inclusión social de mujeres y jóvenes.
Con las botellas de plástico recuperadas del pantano de Jacurici se construyen muros de contención, se utilizan para guardar la miel y las alubias y se venden en los mercados de reciclaje.

El objetivo específico de este proyecto se refiere a la ampliación de oferta de formación socio-profesional para impulsar nuevas alternativas económicas generadoras de renta, desarrollo personal y compromiso con la comunidad de jóvenes, mujeres y adultos del Semiárido. Los jóvenes necesitan alternativas que frenen la emigración y las mujeres necesitan soluciones para evitar el comercio sexual.

Los resultados conseguidos con este proyecto fueron la implantación de cursos de formación socio-profesional en el área de Construcción Civil, Agricultura, Artesanía,  Turismo Rural, Inclusión Digital, Alfabetización y Salud; asesoramiento para las cooperativas Asa Branca y Santa Rosa en la gestión y comercialización de los productos que elaboran; y reforzar la intervención de las organizaciones en la sociedad civil que permitieron fortalecer las dinámicas sociales capaces de incentivar la formación de redes locales y regionales.

Al Centro de Desarrollo acuden 150 jóvenes de 15 a 18 años para recibir formación complementaria en diferentes materias. 5 educadores se encargan de formar a estos jóvenes que por diversos motivos habían abandonado su educación y que deben compaginar su permanencia en el Centro con la asistencia a la escuela, casi la única condición que se exige para pertenecer al Centro.

En el proyecto Lar Santa María en el Semiárido, se han montado tres cooperativas en las que trabajan más de 60 mujeres. Dos de ellas comercializan productos derivados del umbú, un fruto tropical propio de la zona. La tercera, es una cooperativa artesanal que comercializa productos artesanales elaborados con coco y redes de pescador.

Perfil de los participantes:

• Jóvenes de 16 a 24 años.
• Adultos trabajadores con escasa o nula capacitación profesional.
• Mujeres sin formación cualificada y que dependen de la economía rural.
• Miembros de las cooperativas Asa Branca y Santa Rosa.
• Educadores del Semiárido.
• El número de beneficiarios de este proyecto se sitúa en torno a las 1.145 personas.

Córdoba, Argentina (2003-2007)

• “Cuéntame un cuento”. Un proyecto para incrementar la capacidad lectora y las habilidades sociales de niños desfavorecidos de entre 7 y 9 años a través de la creación de materiales didácticos y de su aplicación. Se ha desarrollado en colaboración con el  “Programa del Sol”, dirigido a 25 niños y sus familias.
• “Jugando aprendemos a cuidarnos” y “Superchango” son programas de inserción socio-laboral para jóvenes consumidores de drogas, en el que se elaboró material didáctico y se trabajó en la prevención del consumo.

Cuzco, Perú (1993-1996)

• Construcción de un dormitorio infantil y el equipamiento de un taller formativo para niños de la calle.

Cochabamba, Bolivia (1997-1998)

• Programa de formación laboral.

Managua, Nicaragua (1998-2002)

• Construcción de viviendas
• Construcción de Guardería

San Antonio de Ilotenango, Guatemala (2002)

• Formación para mujeres