31 Ago Un verano de 40 días con Educándonos
ODS 4: Educación de calidad
Educándonos ha vuelto a vivir un largo verano. En este 2021 comenzamos nuestro campamento urbano el 28 de junio con actividades de arte, visitas a organizaciones, escapadas a playas y pantanos, días de piscina y campeonatos deportivos. Terminamos el 6 de agosto con una mañana de piraguas por el río Ebro. 40 días de duración en los que organizamos 23 talleres diferentes además de un campamento de 5 días de convivencia en Enciso. Compartimos espacios juveniles de encuentro de hasta 81 jóvenes en total, que no se olvidarán fácilmente.
En nuestro largo campamento participaron jóvenes de distintas procedencias. La gran mayoría participaron durante todo el año en nuestras actividades, pero también estuvieron jóvenes que se incorporaban por primera vez a nuestro programa y jóvenes provenientes de los recursos de protección de menores del Gobierno de La Rioja (Residencia Iregua, Pisos de acogimiento residencial, Centro de atención inmediata).
Durante estas 6 semanas priorizamos las actividades al aire libre con talleres de arte, barro, museos, excursiones al pantano de Alloz, a la playa de Laredo, piraguas por el Ebro, clases de yoga y meditación, cine…
El broche final a nuestro campamento urbano fueron los 5 días que pasamos en Enciso. El espacio de convivencia en el albergue de Enciso fue muy rico tanto en relación entre jóvenes como en contenido educativo. El foco estuvo puesto en el mundo rural en todas sus actividades. Contamos con la colaboración de Ramiro Palacios que nos instruyó en las características del entorno que nos rodeaba haciendo hincapié en la importancia del cuidado medioambiental.
Durante los 5 días de convivencia visitamos Arnedillo, sus alrededores y pozas, el Barranco Perdido de Enciso y sus piscinas, y disfrutamos de la noche del terror en la Escurquilla.
Además de todas las actividades exteriores, organizamos un Open Space en el albergue donde las y los jóvenes pudieron expresar su opinión sobre diversos temas como el racismo, la diversidad cultural y sexual, el bullying, la igualdad de género, los consumos de sustancias y la atención a la salud mental que tanto se ha reivindicado durante este tiempo de pandemia.
Este verano ha sido liberador para la gran mayoría de jóvenes. Pudimos realizar actividades que nos permitieron reencontrarnos y disfrutar de la compañía y la cercanía en un entorno seguro y muy cuidado.